Francesco Mami es el nuevo invitado en nuestra sección de singles
Parece que la mayor fiesta que va a haber este verano, lamentablemente, es la del festival de contagios entre jóvenes. La pandemia sigue acechando, aunque por suerte ya tenemos a más de la mitad de la población de España protegida . Especialmente la más vulnerable ante el maldito virus. ¿Cómo escapar de la pandemia, del monotema del año y de un verano todavía con limitaciones, aunque sin duda algo mejor que el del año pasado?
El artista italiano Francesco Mami lo tiene claro: volvamos a la locura de los veranos de principios de los noventa. Regresemos a 1991. Los releases de Fransceco Mami han aparecido en sellos como Crosstown Rebels o Rhythm Cult y ha colaborado con artistas como YokoO o David Hasert. Sólo por nombrar tan solo un par de detalles de su extensa discografía y trayectoria artística.
Su sonido principal, el house enfocado a la pista, que bebe de influencias clásicas y navega libre al margen de lo comercial, alcanza otra esfera cuando se trata de composiciones que firma él.
Las vibes de 1991 son excelsas, con una suave percusión y una melodía pegadiza, bailable y seductora, Francesco Mami nos imagina en una campiña inglesa, bailando hasta el amanecer, abrazados y lejos del locurón pandémico actual.
Sin duda, estos son los mejores deseos desde Dust Trax: el viaje musical en el tiempo nos permite desconectar de la realidad actual y situarnos en otros planos en los que seguimos bailando con la mayor de las libertades y sin tener que ocultar nuestra sonrisa bajo una mascarilla.
Hablando de amaneceres, además del delicioso single 1991 —el primer artista internacional que se suma a Dust Trax—, aquí tienes un streaming en vinilo de Francesco Mami durante un amanecer en su ciudad natal de Italia, grabado tras el fin del primer lockdown de 2020.
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