30 años a los mandos, 30 años de CV (nunca mejor dicho), 30 años haciendo sentir, pensar y bailar… ¿Qué hay de aquel Cristian Varela que se subió por primera vez a una cabina? ¿Cómo han sido para ti estas tres décadas en las que has vivido tantas cosas? ¿De dónde sale la energía para seguir desplegando esa magia que tanto te caracteriza?
Todo sigue exactamente con la misma intensidad y la misma pasión que cuando empecé. Ahora tengo la fortuna de poder añadir la experiencia a esta combinación tan bonita. La energía está en todos nosotros, solo hay que encontrarla, canalizarla y compartirla con los demás.
Dejando a un lado tu faceta artística como DJ, sobre la que volveremos a hablar más adelante, hablemos también de tu dimensión como productor y tus sellos, que hace tiempo que sobrepasaron la mayoría de edad.
Estoy muy orgulloso de todo lo recorrido y conseguido junto a mis adorados artistas, amigos y seguidores con mis dos sellos discográficos. Estaré eternamente agradecido a mi segundo hermano mayor, Marco Bailey, por todo lo que me ha aportado durante tantos años de carrera. Mi otro hermano mayor es, sin duda, el gran Tim Baker, al que echaré muchísimo de menos.
A propósito de Tim Baker, ¿cómo llevas la reciente pérdida de esta leyenda de la electrónica americana y gran amigo tuyo desde hace décadas?
Sinceramente, sigo destrozado. Ha sido una noticia devastadora que en un principio me costaba creer. Hasta que finalmente nuestra querida Verónica Beckman, madre de su hijo Donovan nos dio tan desgarradora noticia. Tim significa mucho para mí. Es uno de mis hermanos mayores, amigo, confidente, pura energía, bondad y alegría al que toda mi familia adoraba. Me ha enseñado tantas cosas que no podría enumerarlas aquí. Su música siempre estará con nosotros y le echaremos muchísimo de menos. Espero que las nuevas generaciones le sigan recordando como uno de los grandes de nuestra música.
¿Qué se siente al ver cómo va Pornographic Recordings –uno de uno de los sellos más longevos en activo, con 20 años ya– hoy día? ¿Cómo describirías y definirías su evolución? ¿Podrías darnos un número aproximado de l@s artistas de todo el mundo que han planchado en él?
Es una de las experiencias más gratificantes de mi vida. Imagínate ver crecer una de tus creaciones con tan buena salud, dándote tantas alegrías a lo largo de tantos años. No sabría decirte un número exacto de artistas que han colaborado y colaboran desde que empezamos…seguramente sean cientos a estas alturas. Lo más importante es que hemos crecido todos juntos y tengo la gran satisfacción de haber contribuido aportando mi granito de arena en sus carreras. Grandes talentos también están surgiendo y necesitan todo nuestro apoyo para legar nuestra música a las nuevas generaciones para que mantengan toda nuestra esencia original.
¿Y qué decir de Black Codes Experiments, con 18 años a las espaldas? ¿Por qué Black Codes Experiments? ¿Qué venía a cubrir y cómo?
Black Codes Experiments como bien expresa su nombre, fue un proyecto experimental creado con el fin de investigar sonidos ocultos o raramente escuchados y sin ningún ánimo de lucro. Fue una plataforma de expresión para muchos de nosotros que queríamos expresar la música de una manera más personal. Más tarde estos experimentos curiosamente llegaron a las pistas y comenzamos a tener seguidores con gran inquietud musical.
¿Qué se viene con ambos? ¿Cuáles son sus propósitos a corto-medio-largo plazo?
Lo más importante es continuar con la misma esencia y personalidad de cada sello.
En enero sale a la luz Eight en el sello MORD –de Bas Mooy–, donde se están dando cita algunos de los capos más potentes del techno contundente, rocoso y feroz del panorama internacional. ¿Qué has sentido al crear esta producción? ¿Cómo ha sido producir para este sello?
Bas Mooy para mí es sinónimo de originalidad y constancia. Y es de los pocos artistas que han conseguido continuar con las raíces del sonido Old School atemporal y a la vez futurista del Techno más purista. Es todo un honor formar parte de un proyecto tan profundo y admirado como es MORD.
Y del misterioso proyecto S.I.X. ¿Podrías adelantarnos algo?
Pronto tendremos la oportunidad de disfrutar todos juntos de uno de mis proyectos más deseados de todos los tiempos. Creo que S.I.X va a ser uno de los puntos de inflexión más importantes en mi carrera. Hacer un directo con 6 platos no se trata de técnica ni de ningún tipo de exhibición, si no de vivir una experiencia musical totalmente distinta a lo que hemos vivido hasta el momento en una sesión creada con vinilos.
Cambiamos de registro para hablar ahora de tu vertiente docente, aunque en verdad nunca nos hemos ido de tu devenir –el cual bien podemos decir que es total– en la cultura de la música electrónica–. Y es que llevas 25 años ejerciendo como profesor (en CEV-Madrid, Eumes, Bass Valley, Point Blank School London…). ¿Te hubiera gustado poder tener al alcance profesores de tu talla cuando empezaste? ¿Qué es para ti enseñar? ¿Qué destacarías de la enseñanza en el arte de pinchar, producir y gestionar una carrera musical? A sabiendas de que los magos y los alquimistas no han de mostrar sus trucos y sus fórmulas al 100×100, ¿hasta qué punto crees que es importante que los grandes compartan su experiencia y sus saberes con quienes empiezan y quieren transmitir sinceramente con sus sets y sus creaciones?
Afortunadamente, he tenido grandes maestros en mi formación musical y he aprendido enormemente de ellos, tanto desde la visión de alumno como la de profesor en la actualidad. En mi faceta como productor de electrónica también he recibido muchísima formación, pero más enfocada al estudio de grabación. Cuando yo empecé en todo esto, los DJs éramos totalmente autodidactas y nos fuimos desarrollando a través de nuestros sentimientos y las habilidades que fuimos mejorando con el tiempo. Ahora tengo el placer de transmitir todos mis conocimientos para que mis alumnos aprendan el arte de compartir la energía a través de la música con los demás. Cada uno más adelante expresará sus sentimientos de una manera muy personal. Esto es lo que nos distingue a todos independientemente del aprendizaje que recibamos.
Y aunque contigo se agotan los registros (porque eres deejay, productor, promotor, profesor, has tenido tienda de vinilos…), hay más. Y es que también trabajas con Roland, una de las marcas más prestigiosas en esto de la música electrónica. ¿Cuál es tu papel en ella? ¿Cómo empezáis a colaborar? Son muy pocos los artistas que se han involucrado de lleno en la cooperación con las firmas que nos suplen de los medios para pinchar y producir –entre otras cosas–, ¿qué se siente al ser uno de ellos? ¿Podrías desvelarnos alguna cosita que se venga con Roland?
Todo empezó gracias a un gran productor y percusionista al que admiro y con el que he tenido el placer de hacer mis primeros directos en grandes festivales como I Love Techno, Nature One, Liberty One… Me refiero al sr. Karim Haas, con el que junto a mi querido Pablo Guadalupe, he compartido momentos inolvidables en los escenarios. En aquella época tocaban con las primeras Roland Handsonic y fue él me introdujo al equipo de Roland España. Más adelante, mi agente y amigo David Nus, con el que tengo el placer de seguir trabajando, me presentó en ADE 2016 a los jefazos de Roland UK y ahí empezó todo. Actualmente trabajo con ellos de Beta Tester, Profesor y haciendo bancos de sonidos y masterclasses con sus máquinas.
¡Un sueño hecho realidad!
Dejando, en parte, tu poderosa carrera en el mundo de la electrónica a un lado, vamos ahora a cuestiones más personales –si bien éste va de la mano de ella–. 5 años en Londres, 5 años en la Isla… ¿Cómo va todo por allí? Porque, para quienes no lo saben, aparte de trabajar con Roland y desarrollar Black Codes allá, estás formándote en la orquestación y la dirección de orquesta –algo en lo que eres más que docto por eso de que tus conocimientos en solfeo, piano y música clásica son amplísimos–, ¿con qué te quedas de todos estos años? ¿Qué has aprendido? ¿Qué metas has conseguido y cuáles están por alcanzar?
La verdad es que todavía me queda un largo camino por recorrer. Cuanto más aprendes más te das cuenta de que no sabes casi nada. Me quedo con todo lo que me está aportando Londres y la visión tan desarrollada que tienen los ingleses como sociedad, en algunos aspectos muy avanzada. Debido a todo lo que estamos viviendo, mi formación está desviándose un poco hacia otros horizontes, aunque sigo aprendiendo muchísimo y, en mi opinión, de los mejores.
Evidentemente, no podemos obviar preguntarte por la situación actual, en la que has sido una de las voces cantantes a la hora de defender y reivindicar todas y cada una de las esferas de la música electrónica. Sin redundar en las reivindicaciones que ya has hecho al respecto, ¿qué le dirías al resto de colegas en este mundo? ¿Qué les pedirías? ¿Qué consejos le darías a quienes están más abajo y están viendo cómo su proyección, en parte, se ha visto algo truncada? ¿Qué cosas positivas crees que hemos sacado y vamos a sacar de todo esto? Porque es cierto que la sacudida ha sido enorme, pero también podemos explorar en ella grandes cosas y, sobre todo, explorarnos, ¿no crees? De hecho, tus Rela-X-Undays, bien podrían ser considerados una señora terapia para hacer frente a la situación, ¿no?
Todas estas preguntas solo tienen una respuesta. LA UNIÓN. Da igual el estilo musical, la experiencia o el recorrido que tengamos. Somos una familia y así tenemos que comportarnos apoyándonos, respetándonos y creciendo juntos. Rela-X-Undays es una vía de escape para todos, y me incluyo entre ellos.
Siguiendo con el presente, ¿cómo va todo con el nuevo álbum de Black Codes? ¿Qué puedes contarnos?
Llevo cerca de 2 años creando y recopilando mis mejores creaciones para sacar, por fin, un trabajo verdaderamente salido de lo más profundo de mi ser. Sin barreras, preconceptos, estereotipos y con mi más sincera manera de expresarme para intentar dar luz a tantas tinieblas que estamos viviendo desde hace tanto tiempo.
Creo que es el momento de elevar nuestra frecuencia de pensamiento y por lo tanto de nuestra consciencia. Es por ello que, después de darle muchas vueltas al título, he decidido llamar al álbum sencillamente: LIGHT TIME (Tiempo de luz)
Por fin hay una asociación para el apoyo de DJs y productores en España, AEDYP. ¿Qué te parece? ¿Cómo lo ves?
Después de tantos años intentándolo por activa y por pasiva, con una pandemia mundial como la que hemos tenido y tenemos que enfrentar aún, por fin tenemos una asociación nacional, AEDYP, para que nos unamos todos y vayamos todos a una.
Hasta hace nada, éramos el único país (o de los pocos) que no tenía una asociación dedicada a la protección, el asesoramiento, la gestión, la difusión y, sobre todo, el apoyo para todo nuestro gremio, en especial en momentos tan difíciles. Países como Francia, Holanda, Italia, Alemania…llevan disfrutando de una entidad así desde hace muchos años.
Gracias al esfuerzo incondicional de muchos de nosotros y sin ningún ánimo de lucro, hemos conseguido reunir fuerzas para que, de una vez por todas, tengamos la Asociación Española De Djs y Productores A.E.D.Y.P. Cada vez somos más y más fuertes. Y espero que muy pronto estemos todos al completo.
Esto es todo, Cristian, que menuda turra te hemos dado. Bueno, no, mentimos, pues nos hemos puesto en contacto con tu club de fans y nos han enviado varias preguntas para ti, así que si puedes responderlas también, aquí van:
¿Cómo te organizas en tus sets? ¿Tienes ases bajo la manga o improvisas en todo?
Todo improvisado, solamente organizo mi música como elementos que voy a utilizar en cada set. Lo más importante es que gracias a esta improvisación cada sesión tiene su propia personalidad y nunca es igual a la anterior
¿Te gusta tener al público cerca?
Muchísimo, de hecho, lo necesito. Es vital para mí el poder compartir toda la energía del momento con mi gente.
¿Cómo te gusta que sea tu público en una presentación?
Sincero
¿De que se compone un buen set para ti?
Sobre todo, hay que contar una historia, emocionarte y emocionar a tu público. Luego viene lo demás.
¿En qué te inspiras para crear nuevos sonidos/melodías y volcarlas “armoniosamente” en una producción?
Me inspiro en los propios sonidos en sí mismos. Cuando escucho uno que me impacta, comienzo a sacarle alguna armonía que hable y exprese lo máximo posible. A partir de ahí, voy buscando otros sonidos que fusionen orgánicamente con los anteriores.
Si un día tuvieras que entregar todos los equipos de tu estudio, pero pudieras quedarte con una sola cosa, ¿cuál sería?
Mi tan amado sintetizador NEURON de Hartmann.
¿Cuál es la cosa más rara que te ha pasado como DJ?
Pinchar sin cascos.
¿Dónde te gustaría celebrar tus 30 años de carrera?
En Japón.
¿Espectáculo o técnica?
Ambos tienen que convivir en armonía.
En tu carrera has trabajado con infinidad de cajas de efectos, sintetizadores, mesas de mezclas… etc. Si tienes que elegir uno, ¿qué herramienta es la que más te gusta y por qué?
Ahora mismo la Roland MC707 porque lo tiene TODO.
¿Habéis valorado retomar las fiestas Phrenetic Society cómo fiesta periódica en Madrid?
Por supuesto, pero tienen que alinearse muchos factores para que esto vuelva a ocurrir.
¿Es cierto que también has conocido el ballet?
Sin duda, mis queridísimas y tan añoradas madre y abuela eran las profesoras de Ballet en el Liceo Francés de Madrid, donde mi hermano Luis y yo nos educamos. Nunca podré estar tan agradecido por haber recibido tan excelente aprendizaje durante mi juventud.
De todos los años que llevas como un pedazo de profesional, ¿qué es lo que más añoras y lo que no volverías hacer?
Añoro aquellas noches tan efervescentes junto a mis primeros seguidores en EPSILON. Daría lo que fuese por poder vivir una sola noche en el mismo sitio y a la misma hora con la misma gente. No me arrepiento de nada de lo que he hecho porque todo forma parte de nuestro aprendizaje como personas.
En tus inicios, ¿te imaginabas llegar tan lejos? Si cambiases de profesión, ¿cuál sería?
Siempre he perseguido llegar a lo máximo posible. Jamás olvidaré una frase de mi madre: “Si quieres llegar a La Luna, apunta siempre al SOL hijo!”…y así seguiré sus palabras “forever”.
Mi otra profesión hubiese sido la de pianista, sin ninguna duda.
Ahora sí. Muchas gracias, mucho ánimo y nuestros mejores deseos para con todo cuanto tienes por desatar, que sabemos que no es poco.
GRACIAS A VOSOTROS POR ESTAR AHÍ SIEMPRE.