Charlamos con José María Ramón, director de Ibiza Global Radio y una de las voces más autorizadas de la escena ibicenca, sobre su amplia carrera, sus proyectos y la situación de la Isla Blanca en cuanto a la nueva temporada que está a punto de comenzar.
¡Hola, José María! ¡Encantados de tenerte en Vicious Magazine! Es un honor poder entrevistar a uno de los artistas oriundos de Ibiza que aún siguen en el top de la escena después de tantos años. ¿Cuál es la situación de la Isla Blanca en este momento, con vistas a la apertura de la nueva temporada veraniega?
¡Hola! ¡Encantado de volver a charlar con vosotros! Después de tanto tiempo parados y con tantas ganas de hacer lo que hacíamos y con lo que disfrutábamos, la situación es de euforia. En estos días, estamos viviendo las primeras aperturas de los grandes clubs, con llenos apoteósicos. ¡Tiene pinta de ser un gran verano!
Han sido dos años muy duros debido a la pandemia, donde el ocio nocturno ha sido, sin lugar a dudas, el gran perjudicado. Echando la vista atrás, ¿cómo has vivido esta situación?
Efectivamente, fueron momentos muy duros para nuestra vida diaria, acostumbrados a viajar y a compartir el aliento del público, algo imposible en esos momentos, pero tuvimos la gran suerte de mantener viva la emoción y la fuerza de la música a través de la radio. Recibimos cientos de mensajes dándonos las gracias por mantenerlos vivos musicalmente.
Volviendo al presente y al futuro próximo, ¿albergas esperanzas de que la situación de la isla sea mejor que antes de la pandemia?
La isla nunca podrá ser mejor que antes, no es lo mismo las ganas de fiesta ni la calidad de las mismas (están entrando estilos musicales que nunca nos hubiésemos imaginado), o la monotonía de los mismos nombres de siempre en los carteles, además de que durante este tiempo se ha marchado mucha gente debido al insostenible nivel de precios que tiene Ibiza y que, por ello, ya no volverán.
Llevas trabajando en Ibiza desde hace más de 30 años, y los últimos están siendo de los más difíciles que se recuerdan. Viviste el nacimiento de la escena electrónica y aquellos inolvidables años 90. ¿Cómo ha evolucionado la situación desde aquella época dorada hasta el día de hoy? ¿Eres de los que piensan que cualquier tiempo pasado fue mejor?
Tengo muy claro que sí, el pasado musical, ambiente, libertad y buen rollo que había en Ibiza en otros tiempos, no tiene comparación con lo que es ahora, un espíritu de plástico. Los artistas experimentaban aquí con sus nuevas producciones, y la gente venía a la isla a escuchar las novedades musicales que sonarían en un futuro; ahora, aquí se escucha lo mismo que pueden escuchar en cualquier lugar.
En los últimos tiempos estamos observando que las nuevas generaciones se están moviendo en la escena más mainstream y que incluso el reggaeton se está introduciendo en los clubes de la isla, algo que hace unos años era impensable. ¿Tienes la percepción de que la escena electrónica, tal y como la hemos conocido, y de la que Ibiza siempre ha sido un modelo a seguir, está llegando a su fin?
Realmente me sorprende que clubs emblemáticos de la escena electrónica apuesten por esta escena musical, que no tiene nada que ver con el alma de la isla. ¡Qué te voy a contar!…
Es lo que demandan las nuevas generaciones, y tendrán la suerte de ver a sus artistas favoritos de esta escena en un concierto o actuación, como cuando nosotros esperábamos a que nuestro DJ favorito entrase en la cabina. Es una lástima para los nostálgicos como yo, pero entiendo que tiene que haber un abanico musical para todos los gustos; sin embargo, aún nos queda por ver a los grandes artistas del Pop, como antiguamente, que van viniendo con cuentagotas.
¿Crees que los deejays residentes son actualmente una ‘especie en extinción’ en Ibiza?
Los DJs residentes son los que menos cobran por una sesión, los que más pequeños aparecen en los posters y los que mejor música para cada situación tienen en sus carpetas: te saben hacer desde una puesta de sol, un warm up en un club, o te sabrían llevar perfectamente el peak time en el main room de una discoteca. Tienen largas carreras y largas noches sabiendo lo que es la buena música; los DJs residentes de la isla no tienen nada que envidiar a los grandes nombres, sólo la cuenta del banco. No es que estén en extinción, es que prácticamente no se les valora como merecen. Uno de los grandes problemas es que aquí todo el mundo dice que es DJ, y pinchan por unas copas y un bocata de lomo.
Fuiste un gran amante del rock en tus comienzos y has tocado prácticamente todos los estilos de música, pero, ¿cómo comenzó tu idilio con la música electrónica?
Corrían los años 80s y las tribus urbanas; yo era Rock-a-Billy, y tenía un pequeño espacio en la radio, a los 16 años, con mi tupé; empecé a trabajar en la mítica tienda Discos M15, gastaba todo mi sueldo en vinilos de Eddie Cochran, Buddy Holly o Stray Cats. Por la tienda pasaban todos los DJs, como Pippi, Franco Moiraghi, Alfredo, César De Melero, Joan Ribas, y un largo etcétera de los primeros internacionales que venían a pinchar a la isla.
Allí, yo tenía que probarles todos los vinilos que querían escuchar. Así fue como aprendí a mezclar. Con 17 años ya trabajaba en Los 40 Principales, era el locutor más joven de España. A los años empecé a saltarme la lista de 40 éxitos para tirar algún que otro track de electrónica, lo que no gustó a los jefes, que decidieron que era mejor que me dedicase a pinchar en algún club… y así fue, hasta hoy.
Tal y como nos cuentas, comenzaste a trabajar en la radio a la edad de 16 años, y desde entonces has pasado por casi todas las emisoras de la isla, ganando varios premios, entre los que se encuentra un Vicious Music Awards por tu programa ‘Morning Sounds’. A estas alturas, ¿aún te queda algún sueño por cumplir? ¿Qué queda de aquel José María Ramón amante del Rock-a-Billy?
¡Volví a las ondas! Empecé a trabajar en Cadena 100, lo cual me limitaba a pinchar sólo los temas de la lista de éxitos; al tiempo, David Moreno me ofreció un espacio dentro de su programa de música electrónica en Europa FM, y por aquella época me gustaba mucho el Downtempo, lo que era fácil de cuadrar en un programa propio: lo ofrecí y me lo aceptaron en Radio Exit; al tiempo, se creó Ibiza Global Radio, y fue donde mi carrera de DJ profesional dio sus primeros frutos, llevándome a ganar varios premios nacionales de radio. Uno de ellos, sí, fue un preciado ‘VICIOUS MUSIC AWARDS’ por ‘Morning Sounds’, programa que hoy en día, y después de 18 años, sigue en cabecera de audiencia de la emisora. El Rock nunca muere, aún tengo mis vinilos, y hay pendiente algún que otro evento y concierto por organizar.
Ibiza Global Radio, un proyecto iniciado en 2004 y que no ha parado de crecer hasta convertirse en una de las emisoras más escuchadas del mundo, y de la que ahora eres director. ¿En qué punto se encuentra la emisora de radio más importante de Ibiza? ¿Cuál es el secreto de vuestro éxito?
Han sido muchos años de sembrar y sembrar, de llenar horas de buena música y pasión por este trabajo, siempre rodeado de compañeros que lo vivían como yo, sin importar a la hora que terminases de trabajar; el resultado es lo que tenemos, una emisora de radio que gusta escuchar y que no va a la moda musical.
¿Qué proyectos a corto y medio plazo nos puedes adelantar?
Estamos preparando un gran festival de dos días para final de julio, una residencia con todos nuestros artistas en un famoso club de la isla, varias residencias en diferentes beach clubs y un nuevo estudio de radio en un punto neurálgico y muy concurrido de Ibiza, donde haremos aún más mágicas nuestras tardes de radio. Otra de las sorpresas es Ibiza Global Room, un evento multimedia de música electrónica que retransmitirá sesiones de Deejays internacionales, que pincharán durante dos horas para hacer bailar al público de Ibiza Global TV en el plató de televisión: 20 invitados exclusivos disfrutarán de la atmósfera ibicenca, involucrando al público.
¿Qué legado le gustaría dejar a José María Ramón dentro del mundo de la música? ¿Por qué te gustaría ser recordado?
Alguien que cuando lo escuchabas, te hacía perder la noción del tiempo, soñar y volar musicalmente hasta olvidarte de todos los problemas. Eso es para mí lo más importante de mi labor en la música.
Por último, nos gustaría darte la enhorabuena por tu trayectoria y muchas gracias por compartir este tiempo con nosotros. ¿Hay algo más que quieras añadir para los lectores de Vicious Magazine?
¡Que la paz, el amor y la buena música reinen en el mundo!
FOTOS: Sonia Ramon